Hace unas semanas entre el grupo de la selección mexicana de futbol hubo una fiestecita, que pudo pasar como normal, porque a final de cuentas son mayores de edad y muchos de ellos son casados y otros son solteros, sin compromisos, pero finalmente seres productivos, profesionales y exitosos.

Perros que espantan, finalmente.

Sucede que algunos reporteros de medios escritos detectaron que había pasado algo esa noche, luego de que la Selección Mexicana derrotara a la Colombiana en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, pues tenían fotografías de algunas mujeres que estuvieron paseando por el hotel donde se hospedaban los seleccionados, intentando estar con los deportistas, como sucede en muchos viajes de gente famosa. Aparentemente hubo una fiesta en un salón, donde estuvieron estas mujeres y que eran de la vida galante y no se cuantas cosas mas….esto es solamente para fechar y determinar el origen de todo lo que se vino después como todo un tsunami de declaraciones, amenazas, castigos, reacciones, difamaciones, burlas, puñaladas, golpes bajos y berrinches…desencadenado todo por unos castigos, dados a conocer de manera pública, en respuesta a la insistencia de la prensa.

No hubo un manejo adecuado respecto a lo que había pasado, pues era el primer gran escándalo al que se enfrentaba la única persona digna dentro de todo esto, Néstor de la Torre, Director de Selecciones Nacionales, hasta ayer, que presentó su renuncia al cargo, pues no quiso ser el payaso que se dejaba humillar en su dignidad y tampoco podía permitir que sus decisiones fueran cuestionadas, como lo habían hecho los infantiloides jugadores de la selección mexicana, que sintiéndose expuestos por las declaraciones del Director de Selecciones, quisieron exponer su descontento escribiendo una carta, pidiendo la renuncia o por lo menos la disculpa pública de Néstor, persona non grata entre los jugadores que asistieron al Mundial de Sudáfrica, según palabras ¿claras? del personaje mas conflictivo y «coherente» entre los seleccionados: Cuauhtémoc Blanco. Este jugador dijo que desde entonces los jugadores no querían a Néstor, pero nunca dijo las razones y solamente dijo que esperaba que los demás dijeran lo mismo que él, pues había una opinión unánime sobre el Director de Selecciones. Fue una canallada lanzar a los «leones» mediáticos a la persona encargada de darle un carácter de seriedad a la Selección Mexicana de Futbol. Fue una cobardía escudarse en una supuesta idea común en contra de esa persona. Si no pudiste aportar nada como jugador, no quieras aportar como persona, pues en esta fase, no eres el más adecuado para hablar de disciplina o contra ella.

Hasta la llegada de los convocados al juego contra la selección de Venezuela, hoy por la noche en Ciudad Juárez, no había pasado nada mas. Las sanciones se conocieron en boca de Néstor, suspendiendo a Carlos Vela y a Efraín Juárez de cualquier convocatoria a la Selección, durante 6 meses y hubo once seleccionados mas castigados con cincuenta mil pesos. Todos ellos fueron investigados y se determinó que violaron alguno o algunos de los puntos del reglamento interno de la Selección Mexicana de Futbol. Esto, que es una medida disciplinaria. Si no les gustó, que apelen ante el mismo organismo, no ante los medios…parecen nenitos berrinchudos que les cayeron en su jueguito y no les pareció, así que llamaron a papi para que los ayudara. Salieron en su defensa dos «hermanos mayores» que no han sabido aportar, a estas alturas, mas que inconsistencias: Rafael Márquez y Cuauhtémoc Blanco. Uno, aburguesado jugador que solamente sabe jugar siendo titular del Barcelona y dejando mucho que desear como seleccionado, expulsado de varios juegos en la tricolor. Otro, jugador insignia de muchos equipos, que le encanta salir en los medios a base de escándalos con actricitas insulsas y que nunca ha intentado ser ejemplo ante la juventud y niñez que lo siguen con una idolatría similar a la que los heroes infunden entre los seguidores. Fueron ellos, con sus comentarios, quienes lanzaron la jauría contra la persona que se atrevió a ventilar esos problemas ante la opinión pública y pidieron su «cabeza» a los federativos. Cabeza que no quiso humillarse ante lo expresado contra él y que mantuvo una dignidad mas que intacta.

Los jugadores se salieron con la suya, dicen unos…los federativos se pusieron de rodillas y se bajaron los pantalones, dicen otros…Néstor se sostuvo como los verdaderos hombres, diremos algunos mas, pero lo realmente lamentable es que nuestro futbol pierde una oportunidad mas de tener esa seriedad que tanto extrañamos quienes vemos y disfrutamos el fut semana tras semana. El futbol es el único perjudicado, pues quienes juegan, les interesa mas no quedar mal ante la gente…y quienes dirigen el deporte, sólo ven por los intereses económicos, sin detenerse a desarrollar estrategias adecuadas para plantear las diferentes competiciones que vienen por delante. El precendente que deja todo este lío de fiesta y disciplina, con berrinche y todo, es muy dañino para el futbol…con esto, la gente se irá alejando de los estadios, mas de lo que lo ha hecho últimamente. En los estadios se ven mas y mas barras de presión y menos familias apoyando a sus equipos. Seguiremos viendo violencia entre los asistentes, pues el show que ofrecen en la cancha es muy malito, la verdad…mejor hacen el show en la tribuna, aunque sea lastimando a sus opositores o hasta sus compañeros de barra.

Es lamentable que las personas «profesionales» que hacen el futbol, reaccionen como los chicos rebeldes de las colonias o barrios bravos, amenazando a diestra y siniestra con no acudir a la convocatoria a la Selección de su país, si una persona no se disculpa por hacer su trabajo, para el que lo contrataron. No es posible que no se den cuenta que son ejemplo de jóvenes ávidos de ídolos y que no les importe lo que esos chicos hagan, emulándolos. Hace tiempo hablé sobre lo tramposo que se había vuelto este deporte tan seguido en el mundo entero. Los jugadores siguen haciendo cosas en la cancha que son una burla, como: dejarse caer, fingir faltas cínicamente, patear colegas arteramente, dar codazos y simular que no hicieron nada…podría seguir con muchos mas ejemplos, pero son suficientes para plantearles que todos esos nenitos berrinchudos y tramposos, han traspasado la cancha y han llevado sus estrategias tramposas fuera de ella, justificando lo que hacen diciendo que ya habían terminado la concentración, sin reconocer que estando ahí, seguían siendo parte del equipo mas seguido del país y se deben a la gente que paga por verlos jugar y que los niños los van a imitar, porque son exitosos, famosos y practican profesionalmente lo que ellos solo hacen en la calle o el llano o el parque, por diversión. Son ejemplo, que no les pese, pero atrévanse a cargar con esa responsabilidad como hombrecitos, no como maricones.

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Soy un ángel, te lo juro. Los cuernos los tengo para aguantar mi aro.
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